Mexicanos, presentan dispositivo IoT para disminuir consumo de agua en Smart Cities.

Drop 2.0 es un dispositivo  IoT para monitorear el consumo de agua mediante el uso de indicadores de luz, el cual permite al usuario ahorrar alrededor del 25% del cobro de agua.  

Este dispositivo fue presentado  en el marco del HackatH2On realizado el pasado 13 y 14 de mayo, este evento es organizado por Aigües de Barcelona,  empresa de grupo Suez, misma que se encarga de la distribución del agua en la zona metropolitana de Barcelona. El equipo de mexicanos conformado por M. Raquel Baez Gaxiola, Pedro Rodriguez del Valle  y Victor H. Baños Gonzalez radicados en Barcelona, España, mediante el uso de herramientas de análisis  de Big Data han dado significado a los datasets proporcionados por Aigües de Barcelona identificando los problemas más sensibles de esta región.

Para dar solución a lo anterior  han desarrollado un dispositivo IoT (Internet de las cosas, por sus siglas en inglés) de bajo consumo energético  y bajo costo de fabricación capaz de sincronizarse con los contadores de agua inteligentes de Barcelona o de cualquier ciudad que cuente con este tipo de tecnología  de medición.

Drop 2.0 es un dispositivo visual e intuitivo el cual mediante el uso de señales lumínicas (verde, amarillo y rojo)  indica en qué tarifa o tramo de consumo se encuentra  tu suministro. Una luz verde  te mostrará que tu consumo de agua va en la tarifa más baja o por el contrario una luz roja señala la tarifa más costosa. Esta tecnología es de fácil comprensión para personas desde 1 hasta 100 años, sin necesidad de poseer un smartphone e instalar una aplicación.

Drop 2.0 es una solución innovadora, escalable y portátil pudiéndose colocar el dispositivo en la ducha, en la cocina, en el jardín, o en cualquier lugar donde tengamos un gasto de agua diario. Se estima si se reduce solamente 1 semana el consumo de agua en la tarifa más costosa es posible ahorrar hasta 25% de costo de factura y 3.3 metros cúbicos de agua por familia de 4 miembros . Lo que se traduce además de un ahorro económico en una acción para la  reducción del gasto de agua que afecta directamente al cambio climático y a la calidad de vida de los habitantes de cada región.